domingo, diciembre 30, 2007

2008

Felices y deshechos

Amigos lectores,

la secuencia de videos como despedida del año, falló. Mála leche, es que los imponderables, están para eso, para que pidamos disculpas. Habrá que empezar de nuevo y mejor, en breve. Es más, tan breve será que esta noche nunca tendrá su medianoche, por el cambio de horario planeado por el gobierno, ley mediante, como corresponde a una democracia que se digne. (Aunque en términos económicos no es tan democrática que digamos, ahí todavía asoman los fantasmas monárquicos. Si no, visiten Puerto Madero) En fin, no habrá medianoche. Qué mierda podían importar unos videos mal llevados. Es más, la persona que mañana se tenga que levantar a las 8 am, dormirá una hora menos, pero eso sí, el país gastará menos energía para que los empleados de Techint, puedan seguir jugando a que trabajan en una empresa del primer mundo, como las que se ven en el canal Sony.
La vida es así, termina un año, empieza otro, y vamos a tener que seguir soportando a los iluminados de siempre (Danielito seguirá con su columna en Perfil), a los bailes del caño, (por qué no se fuman uno, me pregunto), al culo de Jesica Cirio (¿no tiene cara de vieja?, si no pagan no se deja) y deberemos aprender a disfrutar el verdadero Chill out de Sarkozy, que sale con cooleada de Bruni, la misma que dijo en reportaje para la revista La Mano, que era una especie de prostituta musical. Acá, dos observaciones. Carla: no te metas ni con la música, ni con las trabajadoras del sexo, no tenes derecho. Aprendé a cantar, porque la materia de marketing, en esa tenés 10.

Bueno, terminamos deshechos como empezamos y suponemos que así llegaremos a la tumba.

Por un 2008 bien deshecho.

felicidades

martes, diciembre 25, 2007

R.E.M. Daysleeper

VIDEO #1
25 de diciembre. Para terminar un año con el mejor DJ, nuestra propuesta: Un video por día para tener en cuenta a la hora de programar la música de la cena del 31. Ideal para acompañar un Malbec 2003 con una entrada mediterránea, qué más, esta canción con la historia de un trabajador nocturno. Con ustedes, REM.

Papel pintado, literatura y gente que se la cree

En la revista Ñ del 22 de diciembre de 2007 se pueden leer dos notas que si bien tocan problemas distintos, bien pueden pensarse de manera contrastada. Nos referimos a la nota de Carlos Gamerro "Cinco propuestas para el decenio que viene" y a la de Marcelo Birmajer "Contra la blogalización". Es oportuno señalar que mientras la primera nota abre el juego a las posibilidades que tiene el campo de la literatura en el mundo de las nuevas tecnologías (contradiciendo a los agoreros que confunden literatura con soporte papel, razón por la cual ven en todo lo que excede a este formato, digital o no, amenazas al corazón mismo de la escritura); Birmajer, presenta un texto penalista, que sale a defender el prestigio de la obra publicada frente al cobarde intervencionismo de los bloggers, a la vez que propone como exponente premiable el modelo escolar de la novela con principio, medio y fin. El primero, optimista, ve en la vanguardia un espíritu que es menester no sólo no olvidar sino que es aconsejable potenciar; el segundo, en cambio, se pone a conservar, desde su sitial de autor "consagrado" (¿por la industria del libro?) los logros obtenidos luego de una vida de escritor laburante y sacrificado. Así dice cosas contra el bloggeo como: "No debe afrontar los rigores de editores ni correctores..." Por su parte, bien señala Gamerro, como los prestigiosos editores de Birmajer son los que han metamorfoseado literatura en libro de mercado. La foto de Birmajer en Ñ lo dice todo. Posa como si se tratara de un autor de la valía de Borges, cuando no es más que uno de los exponentes de la magra actualidad narrativística nacional. Pero bueno, este obediente empleado de "editores" sostiene que los bloggers -en su mayoría, le da pudor generalizar- tiran la piedra y esconden la mano y contrapone a esa actitud la heroica acción de firmar cada texto, para hacerse cargo en caso de que venga la policía. Gamerro, en cambio pasa revista a un derrotero histórico que tiene más que ver con la experiencia de la literatura que con el negocio editorial disfrazado de amor por los libros. La historia de estas notas podría continuar, pero seguramente lo hará con más fortuna en la mente de nuestros lectores.
Para terminar queremos recordar a Birmajer, en referencia a uno de sus párrafos, que tampoco se sabe con exactitud cuánto vende un autor de libros -él, por ejemplo- ya que las cifras declaradas por los editores son difícilmente controlables; tampoco se puede saber cuánta de la gente que compra libros, realmente los lee -muchos sólo se exhiben en las respectivas bibliotecas- de este modo, la crítica que le endosa a los bloggers también le toca en suerte a los textos que pasaron por una offset.

lunes, diciembre 24, 2007

A todos los Deshechos, Feliz Navidad

domingo, diciembre 23, 2007

Mi lindo Julián

Arriba la imagen de un nuevo integrante
de nuestra publicación. Sabrán entender.
Duro de recordar


Bourne era el agente perfecto. Qué mejor que un tipo que mata sin culpa ni memoria. Un tipo que al final del día, después de bajar al muñeco que le fue encargado, se va a su casa, encarga una pizza y ve un partido de football por TV Sí, sería el agente perfecto. Más que obediencia debida, Bourne estaba programado para actuar como un oficinista, en la película, un “operador”. Un muerto, un expediente, un fichero, todo encaja en una lógica en la cual el Estado, entiende el control social y las prácticas para llevarlo a cabo como trabajo administrativo. No por nada, las oficinas de la CIA, desde la cual se dirigen secretos y transnacionales planes de seguridad, pueden ser oficinas como cualquier otra. Un alto jefe de la CIA, puede tener el portarretrato de su familia sobre su escritorio y tomar café en vasitos de papel como si fuera un importador de televisores o el dueño de una fábrica de ropa de lencería. Da igual, se cumple horario de oficina y se sostiene el mismo disciplinamiento burgués que puede mantenerse entre un gerente de piso y un empleado raso. La pequeña diferencia, pero sólo es tal porque se trata de distintos trabajos, es que mientras en un trabajo alguien ordena que se haga un llamado o se pase un fax, dentro de la CIA, se pide que se llame a un “operador” para liquidar un asunto pendiente que puede alterar –esta es la mejor razón de todas- de la seguridad nacional. Y acá quién puede titubear. Si se trata de la seguridad nacional, todo vale. Pero para mal de todos, así como Bourne un día fue programado, otro buen día –teoría del trauma mediante- se desprogramó, y he ahí la madre de todos los males. Lo que no debía recordarse, empezó a filtrarse fantasmalmente de a flashes y al pobre Bourne le surgieron más de un problema. No son tiempos ni empleos para ejercitar la memoria, menos aún para sacar los pies del plato. Así, a Bourne le empezó a surgir esto de “quién soy”, pregunta molesta si las hay. sobre todo si trabajabas para la CIA y de pronto te dicen que es mejor que mantengas una vida recatada. ¿Para qué vas a ventilar asuntos de trabajo fuera de la oficina? El asunto es que nuestro agente se tomo tres películas para encontrar la punta del ovillo. Tres películas, innumerables nombres falsos, decenas de pasaportes truchos –como si fuera argentino- multitud de locaciones. De este modo, lo que antes eran las películas de espionajes entre la izquierda y la derecha, ahora son espías fuera de control en clave high tech y surcando el mundo como un programa de cable para turistas trotamundos.Todo esto puede estar muy bien, pero hay cosas para pensar. Bourne después de todo era un buen pibe. Pasó los entrenamientos de la CIA, lo molieron a palos más de una vez, lo programaron y se desprogramó, manejó, voló, disparó, se peleó, se enamoró, se escapó, se angustió y sin embargo, nunca dejó de ser algo, allá en el fondo de su alma, a la Platón, que siempre quiso recordar. ¿Es que esto puede ser así?

lunes, diciembre 17, 2007

sábado, diciembre 15, 2007

miércoles, diciembre 12, 2007

Provocador



Dijo Aira:

"Para mí leer es una cosa muy horizontal, por ahí por ese sistema de escribir todos los días, y de seguir escribiendo siempre. Para mí un verdadero escritor tiene que seguir escribiendo hasta cuando deja de poder escribir bien. Por eso siento tanto rechazo por escritores como (Juan) Rulfo, por ejemplo. Escriben un par de novelitas, pocas, y después viven del prestigio. El verdadero escritor tiene que tener la generosidad de seguir escribiendo cuando la mente empieza a fallar, como ahora la mía, y ahí es cuando su responsabilidad ante los lectores crece, cuando empieza a escribir mal. Con eso yo no tengo problema porque empecé a hacerlo hace mucho".

Si él lo dice...

domingo, diciembre 09, 2007

Desechos de Buenos Aires. La media última cena

Casi como el mural famoso, pero en una versión resumida y vernácula, sobre ese escritorio: ¿qué se estarán por comer?

Sorry Jesús. Un Banco del Sur, pensado como el Norte manda.

Desechos de Buenos Aires

En su momento de asunción del poder, Mauricio (que es Macri), señala esa zona del cielo, hipotética, teórica, virtual, desde la cual nos va a defecar concreta y materialmente. Ya dirán con voz de vieja trola "yo no lo voté".




martes, noviembre 27, 2007

Ética protestona y el espíritu del machismo

Lo sabemos, pero nunca está demás señalarlo. Hoy los profesores se vuelven putos y mientras diseñan los parciales para asustar a sus alumnos con los devaneos de Proust, piensan qué clase de mermelada será mejor para una noche de amor. Parece mentira. Hoy, también hay lugares como la casa Brandon, un ex salón de fiestas que tiene en sí todo el patetismo de un piso de tablero de ajedrez y una decoración cursi. En esta Buenos Aires gay friendly, sede de marchas queers, nadie se banca, como lo hace Deshecho, presentar un video como este y decir sin miedo, que Olivia Newton John es una de las mejores cantantes de la historia. Hija de una década de anabólicos, música disco con tufillo rocker y largas noches de cocaína, la blonda quackera es, lo que se dice, una estrella en el cielo de Xanadu.
¿Habrá que hacerse puto? No lo sabemos. Eso sí, primero vean este video.

lunes, noviembre 26, 2007

Arte Deshecho

Esto es una muestra de arte democrático.

Los clasificados

No querer salir de casa. Quedarme por rechazo al tedio que me propone ver, como todas las semanas, a mis patéticos clientes, me llena de orgullo. Quizá también de un poco de culpa. Quizá, aún más, de infelicidad. Lo cierto, es que hoy me quedo un rato haciendo las cosas que me gustan, retrasando la salida, sabiendo que incluso así, haré mis tareas cotidianas. Iré por la tarde a la editorial y pasaré los pedidos de mis clientes como si todo hubiera sido hecho con las más estricta disciplina. En la oficina estarán contentos, fingiendo a su vez otras tantas cosas que yo ignoro, pero que de alguna manera los vuelve felices. Los administrativos tienen otros problemas, y los ocupa hasta el cansancio sus pequeños territorios. Defender el escritorio, es como defender la barricada. Sé que tienen largos debates por tonteras, cuestiones de familia, y de vez en cuando, se traicionan creyendo que en esas acciones arteras se prepara la seguridad de su futuro.
De mi rutina me cansa la necesidad de meter todo en caja, de que las cosas sean hechas a la medida del reloj en vez de hacer las cosas a mi medida. Curioso humanismo el de la modernidad, finalmente se olvida del hombre. Acaso porque el hombre sencillamente nunca existió y entre nosotros no sea otra cosa que un común acuerdo, un pacto entre pocos, la idea sobre la que se funda un club de amigos.
Será por algunas de estas cosas que me cuesta salir de casa, así como el depresivo no puede salir de la cama o el que sufre de agorafobia que siente terror a los espacios abiertos. No sé. Las razones me parecen muchas más y más secretas de las que pueda exponer en una charla, distendido, fingiendo hablar de la vida, como hacen los porteños en los cafés todos los días.
Por mi trabajo, excepto cuando me cruzo con algún colega del gremio y nos demoramos charlando en un bar cualquiera, por lo general, no practico las charlas que ya mencioné. Lo mío es mucho más solitario, y así lo prefiero. Mi ceremonia se reduce a tomar un café acompañado por una medialuna y pedir el diario para ojearlo con un poco de profundidad y recordar, mientras paso las páginas, algunas ideas que aprendí en los años de la universidad, cuando me enseñaban cómo leer los medios.
Por supuesto, en mi trabajo, nada de lo que vi en la universidad tiene el menor sentido ni utilidad. Todo lo contrario, en la editorial no lo dicen abiertamente, pero desprecian el hecho de que haya ido a la universidad. Es más, a veces pienso que hasta les molesta, les da envidia, algo de resentimiento. De alguna manera, cultivan cierta brutalidad o repudio y aunque suene paradójico, por tratarse de una editorial, no hay que confundirse, nada más alejado de la cultura que una editora de libros. Bueno, al menos el área donde yo trabajo: ventas.
Los de ventas somos los burros de la editorial, los grasas, si no fuera por los de cuentas corrientes que constituyen una fuerza en sí misma y ostentan la brutalidad de las SS, seríamos la reseca. Por suerte, ellos nos salvan de ser los últimos en la escala humana. Ellos, con su altanería de aduaneros, poniendo el palo en la rueda a todo lo que hacemos, se pasean sin vergüenza exhibiendo sus groserías y amenazando con cerrar las cuentas de nuestros clientes ante el menor retrazo en las cobranzas.
Sí, esto es la guerra cotidiana. No somos otra cosa que las pequeñas elecciones que llevamos a cabo en cada ocasión, cuando alguien nos acicatea y nos obliga optar por esto o por aquello.

martes, noviembre 20, 2007

Premio a la insistencia

Birabent o Tony, como lo llamábamos en el barrio acaba de lanzar otro disco al mercado y lo lanzó con todas las de la ley, como si fuera un discóbolo roquero, lo lanzó por todos lados, hasta la página de Clarín digital tiene un track de su nuevo trabajo como para que lo podamos degustar, y -los empresarios- con las ilusiones intactas se relaman imaginando gente revolviendo las bateas, billetes o plásticos en mano, pletóricos de deseos por tan preciada mercancía. Lo cierto, que es el disco número... van muchos, como diez. El corte de difusión, no está mal, al menos se deja escuchar o mejor dicho, nos da ganas de escucharlo hasta el final y eso, amigos, ya es un logro. Es cierto, en el arte, en este arte que vivimos, ya nadie espera originalidad de nada, los profesores de Puán hace rato tiraron esas ideas por el inodoro de la universidad. Entonces, lo único que nos queda, además de arrodillarnos frente a los curadores, es que un disco, por lo menos una canción se deje escuchar, y eso pasa con el tema "guitarras rotas", inspirado en las fotos de Coppola, de un Buenos Aires que no estaba tan deshecho como éste, donde Tony, nuestro amigo del barrio, el mismo que una vez confesó en un viaje en colectivo 86, cuando se iba de lo de mi vieja en Villa Luro, que tenía miedo de ser un mediocre, sea hoy una estrella en el cielo de los rockers.
Buenos Aires se deshizo, mi vieja dejó este mundo, nosotros seguimos en la de siempre y Tony es Birabent.

miércoles, noviembre 07, 2007

Presentación de Libro



Uno de nuestros colaboradores presenta mañana, jueves 8 de noviembre a las 20, en casa Brandon, su novela "Llámenme Ismael" editada por Tantalia.


Los esperamos.

domingo, octubre 07, 2007

Teatralidades


Amigos, después de mucho tiempo sin subir nada a esta página, inmersos de nuevo en las correntadas de la banda ancha, reiniciamos nuestro contacto con ustedes, obsequiando esta bonita foto, casi pictórica, de un maestro del teatro argie.


Con ustedes Szuchmacher



miércoles, septiembre 05, 2007

Serú Girán - Llorando en el espejo

Tema recomendado de la semana

sábado, septiembre 01, 2007


Astorlogía o la ciencia del tango

No es nada nuevo chicos, en Deshecho escuchamos Piazzolla, qué le vamos a hacer, era un grande, le pese a quien le pese. Hasta a un amigo de la casa que decía que Piazzolla tocaba el tango como si fuera tarantella. En fin, este amigo después agregaba: "cuando no me gustaba el tango, me gustaba Piazzolla". Paroles. A llorar a la iglesia. "El Gato" componía como la puta madre. El resto es desecho. Lo sabemos, pero nunca está demás decirlo. Por eso en este review musical recomendamos una trilogía del maestro que está compuesta por los siguientes cd's:
"La camorra", "Nuevo Tango: Hora Cero", "Tango apasionado". Éste último nombre seguramente fue titulado de esa manera por la casa editora, que es un sello canadiense (su nombre es Just a Memory). La verdad es que, el nombre en cuestión, suena medio for export, pero no importa, lo que vale es que adentro de la superficie espejada, como en la lámpara de Aladino, yace el genio, y sólo hay que ponerlo a rodar para que aprendamos cada vez, de qué se trata lo que podemos hacer con nuestras vidas. No necesitamos preguntarle a ningún gilastro con turbante en plaza Francia qué nos depara el cielo y las constelaciones. Es mejor comerce una fugazza regada con un tinto y olvidarse de los devaneos de escorpio, aries o tauro. Los astros ajenos al mundo, nos ignoran poéticamente, cual tragedia del noble bardo inglés. Dediquemos nuestros delirios cotidianos a los arcanos de la astorlogía. Quizá encontremos las simples razones de una existencia sin claves. Podremos entonces volver al Sur.

martes, agosto 28, 2007

Deshecharte / Galería de fotos


"¿Yo también puedo leer Deshecho?"
Deshecharte / Galería de fotos


"Está Deshecho y poco más, en esta patria."
Deshecharte / Galería de fotos

Como jefa de redacción de Deshecho pienso que deberíamos tener más lectores. ¿Tendremos que buscar nuevas estrategias?

domingo, agosto 26, 2007

Charla sobre emprendimientos editoriales
a realizarse el 12/9 a las 19
en la Facultad de Filosofía y Letras UBA
Puán 480, Ciudad de Buenos Aires,
los esperamos


Para saldar los números en ROJO





Independiente sigue puntero con cuatro victorias sobre cuatro partidos jugados. ¿Hasta cuándo durará el milagro?

ADÑ o ¿la cultura es de todos?

ADÑ

un jefe de gobierno se retira, pero antes de cerrar su portafolio donde ya puso el retrato de su familia, la del chongo que lo acamala y tenía guardada en un cajón con llave de su escritorio, y otras pavadas más, se frena, piensa un minuto y llama a su secretaria. Le dice, "traigame ese decreto así le pongo un gancho". Un jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, antes de irse, ya cerró un acuerdo sucio, a espaldas de sus "electores" -los que nunca lo votaron- y "firma" un impuestazo y el pasaje a un futuro puesto de trabajo con las autoridades entrantes.
Dos especialidades tenenemos en nuestra sociedad, más allá del tango y el asado, "el disciplinamiento botón" y "la chupada de media". Entre medio de esos dos campos está casi todo, incluyendo un impuesto que supone equipar una desigualdad que nadie nada nunca cambiará. Rousseau dijo algo así como que de una apropiación ilegítima, hicieron un derecho irrefutable. Así el tema de la propiedad sigue siendo, mal que les pese a los superados post marxistas, el gran tema de nuestra vida. Fue el gran tema para los indios expropiados en pro de tierras para el pastoreo, lo es para la gente olvidada a diario en pro de... y sí, en pro...
A todo esto, o frente a esto, reina la "cultura" y uno no puede dejar de asombrarse de qué manera todos los medios, por ejemplo, se hacen eco de la prensa de una exhibición de fotos de R. Frank, las que son excelentes por cierto. No podemos dejar de asombrarnos cuando leemos que los suplementos de cultura más grandes y en formato autonómo, juegan a pelearse por un terreno extraño, el de la "cultura". Podemos a leer a Canclini et al y aburrirnos con este tema de la democratización de la cultura y sus etc's. Los dos diarios mayores juegan como los chicos en un potrero cuando hacen pan y queso. Y es verdad, de eso eso se trata: de pan y queso. No hay nada porqué pelear o de lo contrario todo es campo de batalla. La cultura es evanescente y a la vez material. Entre el genetismo de un matutino y el espaÑolismo del otro, queda atrapado el desesperado miedo de los que quieren un pedazo de pan y queso. En una ciudad cada vez más cara, donde abunda la cultura pero no el trabajo legítimo: ¿va a estar bueno seguir siendo esto que somos, elegimos o nos hacemos cada día?

domingo, agosto 05, 2007

¿Por qué no? Otra generación


Sabemos que esto es así, por decirlo de algún modo, es sólo un trabajo, hay que ganarse la vida, en lo posible, haciendo lo que a uno le gusta, sabemos que lo que importa es el dinero y sabemos que en nuestro campo social el dinero conlleva dos cosas: tiempo y prestigio. El tiempo, es la variable del capital contante y sonante, la productividad. El prestigio, lo simbólico. Ambas cosas, son lo ideológico. De Marx para acá, lo que se oculta es lo que importa, justamente, porque lo que se oculta está a la vista, es la materialidad. Hablamos de aquello que poco vale por valer mucho. Hablamos del cielo porque los problemas están en la Tierra. La pregunta que vale es: ¿De qué hablamos cuando hablamos de...?


Hablamos de una generación de escritores.
Hablamos de los que nunca formarán parte de esa generación.
Hablamos de cómo llegamos a ocupar nuestro lugar.
Hablamos de las cosas que tuvimos que hacer para llegar.
Hablamos del ego.
Hablamos de escritores famosos.
Hablamos del poder.

Hablamos del miedo.
Hablamos de vos y de mí.

miércoles, julio 18, 2007

sábado, julio 14, 2007

Música deshecha


The ritual of banana



Si el platonismo incluye a aquellos que de una forma u otra se arremolinan en torno de los debates que el pensamiento del griego sirvió en bandeja a la posteridad, podríamos definir como Platanismo a la filosofía estética que describe como "música banana" la que se encuentra en nuestro humilde blog.
Música para los gorilas que supimos ser y que todos llevamos dentro. Grondonas abstenerse.

miércoles, julio 11, 2007


Estamos Lost

Si te dicen que caí, andate a la mierda

Jack termina la tercera temporada de Lost casi diciendo “volveremos”, como un muchacho peronista de los setenta, la vida le trajo más de un revés y ahora se siente en el exilio de su propio horror. “Qué pasa muchachos”, parece decir, pero resulta que está solo y en medio de esa patriada que quiere acometer, mientras busca a alguien que le haga la segunda, se da cuenta que está más sólo que un comunista en Las Vegas.
No sabemos qué va a pasar, de eso se tratan las series de televisión. Habrá que esperar hasta Febrero cuando, según me dijo el muchacho del video club, estrenan la temporada cuarta de Lost. Para nosotros Jack va a volver, nos va reivindicar, y como no lo hacen los peronistas, llevará la revolución a la isla, esa puta isla verde que nadie sabe dónde carajo queda.
Como corresponde esa isla y algunos vestigios de la serie se enmarcan en los merodeos de la modernidad. Alguien dijo que cuando inventamos el barco también inventamos el naufragio; otro agregó, que los barcos están seguros en los puertos, pero no fueron hechos para eso. De ese modo la modernidad, esa forma de la conquista, la lógica del capital y la empresa, puede que guarde algo de pasión por el riesgo, aunque en verdad todos sabemos que hasta esto es una mentira. Sólo nos queda creernos que el capitalismo es una expresión de la existencia, una forma de la locura, que por momentos se permite un capitán Ahab o un Robinson Crusoe. Porque dónde vale la pena contar algo sobre el capitalismo si no es sobre la cubierta de un barco que se abre paso en los mares en busca de nuevas tierras para someter al lucro y la ficción.

lunes, julio 09, 2007

Y si lo dice Terranova

La terra nova

Hay una nueva versión de la realidad. Vale decir, como la realidad es esa cosa que en verdad no existe, qué podemos hacer con ella sino reinventarla todo el tiempo.
Me siento aliviado. Las generaciones de escritores, como la realidad, son un invento. Nunca falta la persona que se siente tocada por Dios para decir "de acá para allá escriben bien; de acá para allá no sé, ni me importa". Ahora Terranova habla de los escritores nacidos en la década del 70, los que por su parte conforman un todo lleno de promesas literarias. Nadie duda de que esto pueda ser así, pero qué pasa con los que nacimos en el 66? Boludos, a llorar a la iglesia.
Argentina, te quiero cada día más. Lo curioso es que este país es una máquina de autorizar pelotudos. Nadie puede escribir y luego cerrar el culo? Esto también va para mí?
Y... Sí.

martes, julio 03, 2007

Jack Johnson - Sitting, Waiting, Wishing

mientras este mundo nos demuestra día a día que está habitado por gente horrible, escuchámos esta canción.

lunes, junio 25, 2007

Mujeres Intelectuales

Homenaje a dos mujeres argentinas que deslumbran con sus ideas

Marina Jelinek

Estamos en el siglo de la mujer, de esta manera la última edición de la revista Ñ definió los tiempos que corren. Las dos mujeres que homenajeamos, cada una en su métier, representan este expansionismo de género. Por la pantalla del canal de la ciudad, podemos ver los increibles reportajes literarios que realiza Marina. Por otros canales, podemos apreciar a Karina, demostrando que detrás de una cara bonita, siempre puede haber algo más.

Karina Mariasch

Hoy es menester reconocer los nuevos campos que se abren, las nuevas disciplinas que se estrenan, en especial, cuando nos paramos frente a estas dos bellezas nacionales, las que por su parte, representan a una mayoría silenciosa. El siglo XXI será el tiempo de ellas. Chicas, ¡a disfrutarlo!

jueves, junio 21, 2007

Memoria Deshecha

¿Dónde mierda está Julio López?
Un breve texto en su honor

Apariciones

Donde aparece Ricardi aparece Leone, donde aparece Leone aparece Grimaldi, donde aparece Larraqui, aparecen los tres primeros, donde aparecen los tres primeros, aparece Larraqui y aquí la cuestión es: nunca hay “los tres primeros” porque ahora son “los cuatro primeros”. Donde aparecen los “cuatro” aparece el mayor Urruti y donde aparece Urruti, aparecen los soldados Diaz, Alonso y Nevares. Donde aparecen el mayor y los soldados aparecen los “cuatro primeros” y aparecen ¿por qué no? Aprile, Lamarca y Sulinga. Aparecen más tarde, Benitez y Ameli. Se suman al toque Gomez y Bolaños. Mientras aparecen todos estos aparecen Silvano, García y Brailovski. Lucanor Rojas y De Santis aparecen también. Príncipi no deja de aparecer cuando aparecen los demás y con él aparece siempre Albino, que no los deja solos y aparece Brindisi y siempre a su lado, Andreani, Baigorria y Falcón. Donde se encuentran todos aparecen los hermanos Tubinga y no tardan en llegar Burella, Leonardi, Torres y Di Sarli. Rimoldi, tarde pero aparece. Lo mismo Amodeo; y Del Priore no deja de aparecer. Valeta aparece, ¿cuándo no? Miranda aparece de golpe y sin avisar, Martín aparece con Brizuela. Para el caso aparece Acevedo y por las dudas Domisi aparece con Varela. Varela había avisado y así aparecen Batán y sus acólitos, entre otros Monzón, Telch y Alvarado. Había aparecido desde temprano Manrique pero nadie lo había notado. También pasó desapercibido Manusovich, que había aparecido con Lavalle, Ballardi y López. Habían aparecido antes que Ricardi y compañía, Milton y Brown. Para el caso da lo mismo si aparecen o no, Urlanga y Araoz, pero aparecen porque no pueden faltar. Tampoco faltan Bertoni y Goleta. No falla y aparece Curanti con sus hombres de confianza, a la cabeza Dotti, seguido de Amor, Simone y Ansaldi. Aparecen como siempre Torrado, Estrin y Campodónico. De la Vega aparece con gripe, pero aparece. Trayendo galletas y mate aparece Molinari y atrás lo siguen Ferrer, Albrich y Garmendia. De milagro aparece Cohen. No por casualidad aparece Saenz con cara de asombro. Triste aparece Medina. Aparece para consolarlo Burone. La compañía de teatro de Maidana aparece y justo se anuncia que está apareciendo el padre Arriarán. Maistegui aparece ostia en mano y Luna, aparece con un cáliz. Los disidentes de la UOM aparecen transpirados. El padre Arriarán los calma y por gracia de dios aparece el ministro que promete soluciones. Pampillo y Elvin aparecen sacando fotos y muchos otros, pero sobre todo Lamberti aparecen en primer plano. Prendiendo un fuego, sobre el fondo, aparece Montero. Sánchez Orondo se ata los zapatos y esto deja aparecer a Milone, que no se lo veía. Berardi, que no había aparecido nunca, aparece de la mano de Girone. Del Campo, Islas y Vallona aparecen en reemplazo de Lamónica, Kaufmann y Arregui. Sin embargo estos aparecen, al menos por un rato, cuando aparece Besone y Stern. Larrosa aparece sin ideas y Alves y Outes juran que sino aparecen en las fotos de Pampillo y Elvin, no aparecen más. Así aparecen por duplicado: encarne propia y para el recuerdo. Hardy aparece diciendo que “no tanto para el recuerdo, que aparecer es en presente; en futuro ya no sería aparecer”. Lima lo silba y así aparece delante de todos, silbando. A Lima lo silva Elvin que aparece fatigado por la discusión. Aparece desde atrás un tipo extraño. Quintana, que recién aparece, dice que el tipo se llama Valencia o Valenzuela, no está seguro. Igualmente Valencia o Valenzuela aparece. Por un rato, acaso aparece Delucci; y Paez, que está sentado, señala a lo lejos donde aparece Arrieta vestido de negro y hablando por celular. Aparece sin preludios una camioneta con altoparlantes. En sus puertas se lee “Municipalidad de Buenos Aires. División de Apariciones”. El intendente, doctor Núñez, en el interior de la cabina, aparece micrófono en mano. Al instante se oye el discurso de Núñez. A consecuencia de sus palabras surge la necesidad de abandonar el meeting. Todos y cada uno, están desorientados pero con la fuerte sensación de responder a ese estímulo que apareció inesperadamente. Poco a poco crece la confusión y hasta algunos chocan entre sí. Llega la lluvia y el barro en lógica consecuencia. Florece el atropello y por qué no la angustia. Aparece por todos lados la policía. El comisario a cargo, asoma, pero no da órdenes. Lo que se ve al cabo de un rato, es la plaza vacía y mojada bajo la luz del alumbrado.

martes, junio 19, 2007

En los desechos de la crítica

Talking about Betty




Si el registro es un aspecto del discurso que tiene fundamentalmente en cuenta la recepción, es decir que amolda su poética acorde con las competencias de su lector, podemos decir que en este rubro, Sarlo ha demostrado una variada y plural aptitud. Pero esta idea que planteamos no es algo que se nos aparece a priori de leer sus textos, no es que sabemos que determinado artículo fue escrito para una conferencia en determinado ámbito, que luego colegimos que las marcas textuales son coherentes con dicho fin. No, ni bien emprendemos la lectura de una texto de Sarlo, detectamos la atmósfera y corporeidad de su discurso y pensamos inmediatamente que su público debe ser tal o cual. Sarlo comprende perfectamente las necesidades de sus lectores y hace de esa comprensión una estrategia inteligente de mercado –ya que es una ensayista que conjuga suficientemente bien background teórico con llegada popular-; comprende asimismo, cuándo sus lectores son universitarios de un país extrajero y entonces hace una de las cosas que mejor sabe hacer: glosar la obra de otro. Este es sin duda el caso de Borges un escritor en las orillas, pero también es el caso de muchos artículos de crítica o reseña literaria como un texto suyo sobre Cortázar llamado “La novela esperada” –texto sobre Rayuela- aparecido en Il romanzo, volumen 3 titulado Storia e geografía, editado por Einaudi. Pero hay más versiones de los textos de Sarlo, si seguimos esta línea del registro como primer recorte de su obra. Pensamos entonces en una Sarlo más teórica, próxima a la reflexión filosófica y siempre a la moda con los debates en cuestión. Ahí encontramos a la teórica de Tiempo Pasado. Cultura de la memoria y giro subjetivo. Una discusión. En esta línea aparecieron con anterioridad al recién mencionado, muchos de sus mejores y ya clásicos trabajos, como Una modernidad perisférica, La imaginación técnica, etc. Por último, se nos hace insoslayable la Sarlo masiva, lo que podríamos definir como la versión más popular de sus producciones. Nos referimos a su participación dominical en la revista Viva del diario argentino Clarín. Acá Sarlo, contrasta con el resto de la retórica de la revista –de corte algo simplón, pero de una simpleza pletórica de aspectos ideológicos- con un tipo de columna que se emparenta con el estilo de las notas del famoso New York Times. Aparece fuertemente la apelación a la historia personal. Su operatoria se basa en desarmar el aspecto social de un problema –por ejemplo el drama de los cartoneros- para atomizarlo en una historia unitaria, una historia de vida, el caso de un cartonero y su aventura diaria para subsistir. Quienes visiten las páginas del prestigioso periódico de Nueva York, notará inmediatamente que esta estrategia discursiva es constantemente explotada. La Sarlo que aflora en estos trabajos –que un conocido crítico literario y novelista definió como un arriesgada apuesta vanguardística- está mucho más cerca de una escritora liberal que lo que podríamos suponer de antemano a saber por su biografía más o menos pública.

Madonna - Human Nature (1995)

Una lírica que no es marxiana, con una estética que sí lo es.

lunes, junio 04, 2007

Carpenters - For All We Know

Para nuestro amigo el "gran Martincito" como gusta que lo llamen, esta canción, que acorde con su lírica, se la cantan mutuamente -eachother- el pelado Telerman y el estudioso Filmus, con vistas a la próxima derrota electoral que experimentará el barbudo. Nos equivocamos muchachos. La política se hace con lo que se tiene y no con lo que se sueña. ¿Qué esperaban de la gente? "Lo ideal es real"

domingo, junio 03, 2007

Elecciones 2007 en Buenos Aires

Pro Mierda

Un viaje en taxi hoy al mediodía -domingo 3 de junio de 2007, día de elecciones. El taxista nos preguntó a quién habíamos votado. Respondimos que a un candidato, no importa cuál, ese candidato no era el lider del Pro. El conductor nos respondió que el había votado a "uno malo". Fingiendo ingenuidad preguntamos "¿a quién?". El chofer respondió "a Macri" y agregó como haciéndose el moderado "me gusta, la segunda, esa chica Michetti". Contestamos que estaba bien, sin ganas de seguir la charla. El taxista concluyó: "dicen que va a ganar por muerte". "Eso dicen", terminamos.
Lo que nos quedó en el tintero fue una reflexión final. En algo coincidimos con el taxista. Nosotros también asociamos a Macri con dos palabras que el chofer señaló: "malo", la maldad y "muerte".
Esas son las dos cosas que deseamos -desde este blog- a los votantes de un político -esta palabra es demasiado generosa- que ya gobernó la Argentina durante una década, pero con otro nombre: la alianza menemista-ucedé.
Después no digan que no lo votaron. Lo votaron y se lo merecen: desechos de Buenos Aires.

sábado, junio 02, 2007

Travis - Sing

Con un final a los Tres Chiflados, este video y esta canción, todavía nos dan ganar de seguir escuchando a esta banda.

martes, mayo 22, 2007

Bridge Over Troubled Waters

Después del sermón del Padre Deshecho, una canción de iglesia para nuestros fieles.

sábado, mayo 19, 2007

Deshechos laborales

La razón de sus vidas

Somos unos boludos. ¿No digan que nadie se había dado cuenta? Vamos a pensar, entonces, que los boludos son ustedes y eso, amigos, de la audiencia, del lectorado, no se dice nunca. Es casi el padrenuestro del mercado, la frase final de todo diálogo: el cliente siempre tiene la razón. Incluso esa razón que nadie tiene, esa que no existe, esa, también la tiene el cliente.
Hace unos días, unos amigos nos comentaron que los últimos post que subimos a Deshecho, por su carácter comprometido, manifestaban una merma en la calidad. Para ser más precisos, se animaron a decir que eran "berretas". ¿Qué curiosa época en la que vivimos? Ni los chinos son comunistas. De los liberales no decimos nada porque siempre fueron unos malditos hijos de puta.
Pero bueno, pensábamos en esto que nos señalaban nuestros amigos. ¿Tendrán razón? Esa razón que no tienen los clientes. Hoy el mundo se volvió tan Alan Pauls, hay que ser lindo y escribir novelas del siglo XIX para que las chicas y los críticos literarios, gracias a Anagrama, las lean en el subte y se masturben en secreto bajos sus cómplices duchas. O sea, a la mierda el engagement, que ya fue, hoy la formalidad es el más deseado tesoro.

Mientras tanto en ciudad gótica, uno de nuestros colaboradores escuchaba la siguiente respuesta de parte de la rasposa voz de su jefe, a propósito de un legítimo reclamo sobre horas trabajadas en la Feria del libro 07, las cuales no fueron remuneradas, las voz rasposa dijo con tono de consejo paternal: "No pase facturas. No está bien".
Nuestro colaborador pensó: "Qué lástima que en la Feria de la cultura se hayan facturados los libros. No está bien pasarle facturas a los clientes a cambio de los textos."

En definitiva, este blog se nos fue a la mierda con tantos derechos de los trabajadores. Mejor leer el Pasado de Pauls. Todo tiempo pasado fue mejor y además, el cliente, esa categoría que superó dialécticamente al ciudadano, siempre tiene la razón.

jueves, mayo 17, 2007

Nuestro Diccionario

Palabras deshechas *

Los pequeños placeres trotskistas, esos momentos donde acariciamos la ilusión de la revolución... Revolución es una palabra que el otro día vi escrita sin tapujos en la tapa de la revista Genios con motivo de la memoria de aquel 25 de Mayo. Palabra en fín que, fuera del campo de la escolaridad, es mal vista, por pestilente, por setentista. Hoy que muchos intelectuales se jactan de haber superado a Marx con reversiones del marxismo tan sofisticadas que nadie puede entender, la realidad -palabra complicada en sí- sigue funcionando con la vieja lógica del capital. Y si no, andá a pedir un aumento a ver qué pasa. Pretendé formar un sindicato fuera del que tocó en suerte y verás como unos lúmpenes peronistas te rompen los huesos una noche en Mataderos. Muchas veces sueño con que suelte el toro que se le soltó a Echeverría en el Matadero y nos salpique a todos de barro.
Con el precioso barro de la historia.

* Nota acercada por uno de nuestros corresponsales en Buenos Aires

domingo, mayo 06, 2007


Sobre un dragón llamado Cortázar

En una camioneta como esta de la foto, Julio Cortázar y su mujer Carol Dunlop, recorrieron la distancia que separa París de Marsella. En ese recorrido hicieron todas las paradas necesarias como para elaborar el libro Los autonautas de la cosmopista. Un libro de viaje, que es turístico si por turismo entendemos una variante de la aventura.

En homenaje a ese dragón, el texto que sigue:


Fafner

Hoy que la ciencia demostró que los mitos eran puro cuento –se comprobó que el caballo de Atila no sabía trotar– hay muchos para los que la existencia de Fafner no remite a nada. Algunos sostienen que es un índice mocho que no señala a ninguna parte. Y los que lo conocen de más cerca saben que con suerte y una fuerte bronquitis otoñal, apenas podría escupir una flama que no alcanzaría para encenderle el toscanito a un jubilado en la plaza.
Para todos es el triste emblema de una raza venida a menos. Su leyenda no asusta a nadie; es más, hay gente que, aún viéndolo en un buen día, jamás llegaría a relacionarlo con sus antecesores, aquellos brutos mastodontes que supieron sembrar el terror en la lejana Prehistoria. Este dragón famélico merma sus potencias, día a día, tras las rejas de su jaula en el zoológico municipal.
Las autoridades de dicha institución, están pensando en reemplazarlo por una tortuga marina de Nueva Guinea que en una pileta olímpica es capaz de permanecer días sumergida sin alimentarse. “Podría ser una gran atracción”, prometen en rueda de prensa. Pero hasta ahora son meras promesas electorales de quienes buscan perpetuarse en un cargo. Lo cierto es que el presupuesto es insuficiente y en lo que toca a Fafner, a nadie le interesa sostener monstruos pasados de moda. A decir de un conocido mío que trabaja en la administración del zoo, el grueso de los fondos que gira el Estado se dedica a mantener bien alimentados a la boa constrictora, las aves rapaces y al león, que el mes pasado, por aparente negligencia del cuidador, se merendó a un niño de unos seis años.
Se sabe que la jaula de Fafner, el dragón, hace un par de años que no figura como parada obligatoria en el plano que enseña el recorrido de la visita guiada. La melancolía tardía de algún chico obliga a que su madre lo lleve a ver la jaula de Fafner, pero cuando llega, la decepción ensombrece su rostro y el chico sale tirando del brazo de su progenitora y clamando por pochoclos y gaseosa.
Un psicólogo de animales que trató a Fafner el verano pasado elevó un informe que salió publicado en la revista veterinaria “La jungla de hoy”. Se puede leer en ese artículo cosas como “Fafner experimenta un estado depresivo, producto del desarraigo y la falta de filiación”. “Es cierto que se le buscó pareja”, compensa el especialista, pero se lamenta “resultó ser el último de su especie”. El artículo cierra denunciando el estado actual de las cosas “en el mundo de hoy” e invitando a reflexionar sobre cuestiones de medio ambiente y hábitat.
Fafner ajeno a esta bibliografía se muestra consumido en sus propios fuegos, oteando el horizonte hecho de edificios, fumándose de a poco.
Recientemente un canal especializado en flora y fauna, realizó un especial sobre dragones. Allí estuvieron toda una tarde montando luces y cámaras. El resultado fue un espectáculo circense donde se veía a Fafner tratando de cocinar unas brochetes que le pasaban a través de las rejas.
Dos días después de la emisión del programa, Fafner se apagó para siempre en su jaula. En la sección de sepelios de la revista antes nombrada se leyó el siguiente obituario: “murió hoy en el zoológico municipal, Fafner, el último dragón que quedaba”.

miércoles, mayo 02, 2007

Frank Sinatra - Fly Me to the Moon Lyrics

A lo que nunca va a llegar Gerardo Sofovich, por más que intente hacerse el pesado.

martes, mayo 01, 2007

Día del Trabajador

1° de mayo. ¿Nos acordamos?


Hay un problema que podríamos llamar de los "alcances". ¿Hasta dónde llega una problemática? ¿Hasta dónde un conjunto de presupuestos puede dar respuesta a un problema determinado? ¿Hasta dónde una proceso histórico puede seguir siendo analizado? Por supuesto, podemos seguir pensando preguntas. Pero, si pensamos respuestas podemos decir: una sola persona no puede abastecer nuestras curiosidad saldando cuanto interrogante se nos ocurra, podría ser tildado de autoritario; un grupo de personas, tampoco, podría ser tildado de vanguardia esclarecida (¿les suena?); un conjunto de partidos, quizá caiga en la desgracia de ser tildado "demócratas inútiles". Por cierto, los que aceptamos que las problemáticas no siempre tienen una solución acabada y unilateral, descubrimos a diario, que otras personas, se especializan en la acción de tildar y sueltan adjetivos tales como "berreta" cuando entiende que un texto está inacabado o cuando de su lectura se desprende que no garantizamos -después de dar una propuesta- ninguna clase de resultado. (cfr. nota sobre la Feria del Libro 2007 del mes de abril) A veces entramos textos -a este blog- que sólo quieren ser disparadores. En cambio, no aspiran a ser perfectos ensayos de proyección política. En el post mencionado, tiramos la idea de una agremiación de trabajadores especializados en el tema "libro" porque entendimos que de esa manera, con una clara conciencia de su propia fortaleza, un grupo acotado de trabajadores, podría, llegado el caso, tomar una medida de fuerza. En el caso concreto de la Feria del Libro el 1° de mayo, no asistir a trabajar. Sin embargo, hay personas que se sienten defraudadas por una retórica del compromiso. Está bien, hay libertad de pensamiento. Creemos por otra parte, que en nuestro espacio, también mantenemos un compromiso con la retórica y que no nos vaciamos de sentido. Es más, pretendemos hacerlo fluir todo el tiempo. Como dijimos cuando empezamos estas líneas, los alcances deben pensarse en todos los sentidos. El que señala, también es señalado. El acusa de "ideológico", también tiene lo suyo. El que naturaliza, por algo lo hace.

Hoy escuchamos a menudo, críticas al pensamiento de izquierda de parte de personas que se paran frente al devenir histórico desde un lugar, que además de no entenderse bien, creen que no deben justificar de ninguna manera. Para ellos, lo antes dicho sobre los alcances. Los problemas que con orgullo señalan como no resueltos por un pensamiento de izquierda, tampoco lo resolvieron ellos, nunca, y mucho menos, en el día a día. Es más, siempre nos proponen las mismas recetas a contracara de tratarnos de ingenuos. Para ellos también, nadie nos da garantía del sentido de la historia, tenga ésta o no, un sentido, a priori o en acto.

Para nosotros, hoy es nuestro día. ¡ Vivamos nuestro 1° de mayo !

ACTITUD NEGATIVA

BUENOS AIRES -
(TU DESIGUALDAD)
PATROMONIO UNESCO
DEL HORROR



Lecturas deshechas. Ocio, novela de Fabián Casas

El Ocio debería ser la religión de los pueblos

No conocemos a Fabián Casas de ningún lado. Él tampoco nos conoce a nosotros. Estamos casi seguros de que tampoco lee nuestra página, como no lo hace más del 99 % del resto de la humanidad. Alguien dirá ¿a qué vienen estas palabras? ¿Qué sentido tienen, si el objeto de este texto es una mera reseña de alguna obra del mencionado autor? Pues, la verdad, es que estas palabras no vienen a nada en particular. Sin embargo, no son un simple carreteo. Entendemos que hay algo más que justifica su presencia aquí. Creemos contra toda teoría literaria puramente inmanentista que lo que viene en breve estará menos viciado por cualquier parentesco, filiación, o sencillamente un amiguismo sincero u oportuno, justamente por tener la propiedad del anonimato total. Sabemos cuántas palabras laudatorias recorren las calles colectoras de la literatura, fieles a la lógica de los dones o del Potlatch. En nuestro caso no hay nada de eso. No por eso somos mejores, ni tenemos mayores méritos ni aciertos: que alguien sea chupamedias no invalida sus capacidades, las que por otro lado, pueden ser muy variadas e interesantes. Dicho esto, lo que nos toca, es aventurarnos sobre una novela breve de aparición reciente, llamada “Ocio”.Lo que podemos decir sobre esta novela corta es que trata de armar a lo largo de una serie de aventuras hiladas con sutil cadencia e imperceptible declive una definición. Como si todo el texto conformara un diccionario de una sola palabra. Es probable que esto sea válido para casi toda la literatura, sin embargo, en este caso, en un momento de la lectura, como una manzana, nos cae la sensación de narración alcanza a perfilar una idea multicolor y prismática de esa virtud llamada ocio. Sí, esa especie de negatividad adorniana que se para frente al fluir cotidiano del trabajo, de las voces del barrio, y articula de alguna manera, con una voz que en este caso no se llena de los tics del realismo, la perspectiva de los hechos para mostrar su carácter convencional. La casa donde el personaje principal vive, se va mostrando en distintos momentos como si fuera uno de esos dibujos cubistas los cuales, luego de mirarlos tomando distancia nos dan una figura completa. Así, con este procedimiento de armado facetado –al menos esta es nuestra interpretación- cada una de las voces y los cuerpos, logran con el correr de las páginas aparecer frente a nosotros en toda su dimensión, pero sin desdeñar cierto carácter fantasmal. Porque siempre aparece un resto, un fragmento ligado al discurso de la falta, que potencia las realidades de los personajes dándoles esa profundidad espectral.

Recomendamos la lectura de Ocio, novela de Fabián Casas, publicada en 2006 por Santiago Arcos editor, Argentina.

Elecciones afectivas


Historia del Ojo


Los gustos no son libres. La trama de causas que soporta nuestras elecciones es por demás compleja y seguramente debería ser estudiada de manera multidiciplinaria. Como cuando hablamos del problema de la inflación y aparecen toda una serie de analistas que siempre atribuyen las raices de este fenómeno social, económico, etc. a razones monocausales. Por ejemplo, los monetaristas que entienden que la única causa de la inflación es el alza de los salarios. Habrá, entonces, que pensar en soluciones más plurales, con una mayor cantidad de abordajes y con una verdadera voluntad por el consenso de parte de los distintos actores sociales. Algo difícil dentro de una lógica capitalista.


¿Todo esto para justificar porqué pusimos esta foto del ojo? Sí. Simplemente porque nos gustó. Porque es un ojo que viene de un país extraño, con días torridos, y tardes de ocio otoñal. Saludos a la gente de Chechania.

domingo, abril 29, 2007

Feria del Libro 2007

La cultura de la Feria

Se acerca el 1° de mayo y la Feria del Libro estará abierta como cualquier otro día del año. Muchos editores que se cuelgan las medallas por su heroica resistencia en los años de la dictadura, parecen olvidar el sentido del 1° de mayo. Como los cocineros que no comen lo que cocinan, venden libros con la izquierda -en muchos casos- y facturan con la derecha.Esto no va a cambiar hasta que no aparezca una agremiación de trabajadores del libro que sea independiente de empleados de comercio.





miércoles, abril 25, 2007

Deshecharte

Narrativa Deshecha

La Cartonerie

Toda obra de arte es un delito a bajo precio
T.W. Adorno

I

No hubo más que noes a los petitorios y entonces el Ministro y su recorte no pudieron menos que tener éxito. No hubo hambruna, tampoco un plan de ayuda social. Las clases no empezaron y nadie dijo “no” al estado de cosas. El Presidente, mientras tanto, no claudicó; sólo trocó en sus discursos unos pocos adjetivos negativos. Por otro lado, no pudo no negociar y finalmente privatizó las últimas reservas no explotadas, sin augurar mejoras para el año siguiente. Se supo que en un discurso que no llegó a pronunciar había escrito: “No negaré que hubo un alza en los precios, tampoco, que el campo no tuvo cosecha, sin embargo, no dejemos que la desesperanza nos gane”.
En mi vida personal, mi primo, que siempre volvía del trabajo en tren, no llegó a decirme “esperé el tren, pero nunca llegó”. A decir verdad no tuve más remedio que inferir esto. Nunca más volvimos a vernos después de aquella mañana en la que nos despedimos y él se fue para la fábrica. A mi mujer la esperé en vano. Había salido de la ciudad a visitar a unos clientes, pero no habrá encontrado manera de volver. Hace unos días, me pareció que mi hijo, por no molestar, no se atrevió a preguntarme por su madre. Los dos solos, en casa, dejamos de salir a pasear, como solíamos hacerlo después de cenar, simplemente porque dejamos de cenar. El régimen de ayuda social se detuvo porque según palabras del ministro “no podemos no recortar gastos superfluos”. Mi hijo y yo no imaginábamos cómo era no comer. “No vamos a lograr resistir mucho tiempo más”, pensé. Aunque el tiempo no dejó de pasar como antes, como siempre, comenzó a tener menos importancia o simplemente dejó de tenerla desde el día en que tuvimos que empeñar el reloj, no sin el agravante de no conseguir dinero a cambio. Al día siguiente de haber dejado en garantía el reloj, fuimos a buscar la suma prometida por el prestamista, pero la casa de empeños no había abierto sus puertas. Un vecino del local me comentó que había visto al dueño cerrar el comercio la víspera, pero que ahora ignoraba su paradero. “¿No va a hacer la denuncia?”, me preguntó bajo la lluvia, frente a la persiana del local. “No veo que sea posible, no tengo a quién denunciar”, le contesté.
“Por esta razón -comencé a pensar- para mi hijo y para mí, el tiempo deja de pasar, porque el tiempo es eso que medimos.” Así, la palabra tiempo comenzó a desaparecer de nuestro vocabulario. “¿No la vamos a usar más?”, me preguntó mi hijo. “No sé –le contesté–. ¿Por qué?” No respondió. Sin embargo, no dudábamos de que el tiempo, que no dejaba de acorralarnos, en la urgencia de quien no tiene qué comer, no dejaba simultáneamente de desaparecer.
Lo mismo notamos del espacio. Todo comenzó a volverse prescindible, anecdótico. El administrador del consorcio no salió en nuestra defensa cuando el dueño del departamento que alquilábamos con mi hijo, le advirtió que no toleraría más negativas a la hora de venir a cobrar. A esto, el solícito administrador respondió: “No se diga más, en breve, no ocuparán más el departamento”.
No pudimos salir por la puerta de adelante ya que habían decidido negarnos ese privilegio. Eso podría habernos parecido una ofensa, pero mi hijo y yo no lo tomamos así. Estábamos acostumbrados a salir por la puerta lateral que daba a una calle sin salida, mucho menos ruidosa que la avenida que rozaba la puerta principal. Esta avenida, sin embargo, no dejaba de tener la apacible vista del parque municipal, que estaba cerrado desde hacía meses, cuando la última partida del presupuesto dejó de existir.
Finalmente resultó no ser una mala salida a la situación. Decidimos saltar la valla e instalarnos precisamente en el parque, que tantas veces habíamos visto, sin reparar en él. Del otro lado de la valla, comprobamos con mi hijo que no éramos los únicos que usábamos la intimidad de ese parque como residencia temporal. Un señor de barba muy larga nos recibió con la siguiente pregunta: “¿No me van a decir que a ustedes también los echaron?”. “No le podemos decir que no”, respondió mi hijo rápidamente. Los tres nos reímos. “Los invitaría con algo, pero todavía no pude conseguir nada para desayunar.” “Está bien, no se haga problema, recién llegamos y vamos a ver dónde podemos ubicarnos.”
No fue difícil encontrar una parcela donde sentarnos a la par de la casi ninguna cosa que llevábamos con nosotros. Sentarse para comprender eso que no pasaba, y entender que nuestra inercia en la nada podía no tener fin. Claro que no era pesimista: ser ya me bastaba y adjetivarme, llegado el caso, era un lujo que no me interesaba usar. Mi hijo también era, pero yo noté que él había empezado a ser antes que yo. Me pregunto si en un futuro llegará a decir “yo empecé a ser desde muy chico” y aunque esto no sé si será así, no dudo de que sea posible.
Pero no me parecía propio pensar en el futuro cuando el presente no dejaba de amedrentarnos. No era que no valorara el hecho, que nos privilegiaba, de estar ahí y en ese momento, en el filo de la existencia. Lo que ocurría era que no se podía negar que estábamos hechos de discontinuidades. No somos un espacio homogéneo; estamos hechos de grietas, pliegues, donde no siempre crece la certeza. Por el contrario, no puedo negar que en estos resquicios muchas veces crece lo opuesto a la nobleza y entonces, cuando no nos habita la virtud, podemos volvernos nosferatus que no encuentran un lugar donde saciar sus inquietudes.
Desde ese punto de vista no había misericordia para nuestras almas, estábamos obligados a tornarnos más reacios a cuestiones espirituales y no sin melancolía, pero dispuestos a no mirar hacia atrás, decidimos no cejar en nuestro derrotero. “No veremos la orilla de enfrente, ni la luz en el fondo del túnel –le dije a mi hijo– pero ya verás que nada nos detiene.” Me sonrió, mientras se negaba a comer solo una galleta, que no había querido comer nuestro vecino de barba, y al mismo tiempo que la partía me dijo: “No hace falta que prometas nada, no tengo dudas”.
Habida cuenta de que en ese sencillo acto de la galleta se cerraba un trato de caballeros, los dos entendimos que el futuro no iba a ser un problema. Además, en lo personal ¿quién podría negar la actitud heroica de dos hombres que no temen al devenir? Ese mismo devenir que no dejaba de afligir a la mayoría, a nosotros no nos afectaba más que lo que podía incomodarnos la lluvia cuando estropeaba nuestra casilla de cartón y había que entender que era un material no durable.
En el contexto de nuestra arquitectura, el señor de barba, que, según dijo una noche, había sido arquitecto, se acercó, para preguntarnos si habíamos escuchado las nuevas negativas del gobierno a los reclamos de los sin techo. Con mi hijo nos miramos, mientras detrás de nosotros, la casilla se desmoronaba como una galleta de agua en un café con leche, y al unísono contestamos que no. “Pues bueno –dijo el arquitecto– no hubo arreglo. A partir de mañana no nos van a permitir que estemos más acá. Vienen las topadoras.”
Nuestra precaria arquitectura no dejaba de tener un lado positivo: Nos volvía nómades. Contrariamente, todos aquellos que proclamaban junto a sus chimeneas las teorías del “no-lugar” no pudieron menos que ver realizadas sus hipótesis. “Cuando la experiencia es ajena –le dije a mi hijo– mientras salíamos del parque a la par que entraban las topadoras, no podemos equivocarnos.” “No es para amargarse –me conformó– no va a faltar un lugar para nosotros.” “No me amargo hijo, sólo pienso en voz alta.” El arquitecto, al que nos encontramos en una esquina del parque, nos dijo que no tenía pensado dónde ir. Le respondimos que se uniera a nosotros y que ya íbamos a ver qué pasaba. “¿Están seguros de que no incomodo?” “No, hombre, no incomoda, acá a nadie se le niega nada.”

II

Aprendí a ver la funcionalidad de la arquitectura desde la primera maqueta que hice cuando era estudiante. Sin embargo, la funcionalidad no es el tema en cuestión.
Hoy cuando camino por las calles y veo personas durmiendo en cajas de cartón siento un profundo respeto por la mente humana. Desde tiempos inmemoriales, el hombre buscó refugio en las más diversas formas de la naturaleza. ¿Por qué no ver un arquitecto en esos hombres que con unos cuantos cartones edifican su hogar? Los mueve la necesidad de dormir a cubierto una o mil noches. Pero lo increíble es ver cómo entienden lo que hoy definimos en la arquitectura de vanguardia bajo la idea de lo efímero, lo mudable. Son los padres de la arquitectura integrada al medio. Captan profundamente la vacuidad de todo proyecto. El arquitecto como lo entendíamos murió. Quién quiere la firma del autor de un rascacielos en la parte inferior de un plano. Hoy la ciudad se disuelve. Esas casas nómades son la forma pura. Si esas casas, esas formas, expresan la nada, ¿qué son sino fantasmas? No lo son para otra cultura, pero sí para la nuestra. Nuestra idea del espacio es diferente. No pensamos el espacio como en la casa japonesa donde las paredes se mueven y de pronto, con un simple corrimiento, la casa es el jardín. En mi estudio, al lado de la maqueta del nuevo parque municipal que estoy diseñando para el gobierno de la ciudad, tengo unas piezas de cartón que me regaló un artista japonés. Esas piezas tienen partes móviles articuladas por unas pequeñas rótulas. Toda su estructura es sensible a las variaciones de la humedad ambiente, esto hace que todo el tiempo, según varíe la humedad, estas figuras muden sus poses. De acuerdo a luz que entra por las ventanas, las piezas proyectan sombras y todas las tardes distintos fantasmas se mueven por mi estudio. Llego a sentir una especial familiaridad con ellos. Son espectros cuya imagen es una evanescencia caprichosa. Humanoides o traslúcidos dinosaurios, se arrastran por el suelo y a medida que el tiempo pasa se continúan, quebrados, por las paredes, por donde trepan hasta el techo. Para ellos la arquitectura no es una jaula, no es una prisión: es el lugar donde poder ser, el plano donde alguien los puede ver, y claro, sabemos que nadie es si no es visto.
Pero nosotros tenemos que construir, de eso se trata el progreso. Piso sobre piso, hacia el cielo, como en Babel, pero sin dios. Sólo para subir más alto y poder ver más lejos. Sí, casi pensar que el suelo es un viejo recuerdo, el mero lugar donde las topadoras revuelven el barro, las excavadoras hacen agujeros para asentar las bases de hormigón de nuestras torres, que van a erguirse primero esqueléticas como modelos de acero y después brillantes como si fueran el collar de una mannequin. Siempre seguimos la misma lógica y pasamos del plano al volumen en un simple acto; la continuación perfecta y acabada de nuestra soberanía sobre el mundo. Del proyecto al hecho en una sola línea que se traza desde la regla sobre el papel y continúa como si dibujara sobre las vigas, las ventanas. Todo en un solo y unívoco acto. Es el continuo: el plano y la ciudad, son una misma cosa, y todo lo que vemos ven en el plano, lo vamos a ver en la ciudad. Digo progreso, progresión y pienso en una cadena incesante de hechos vanos o no. Un puro devenir de apuntes y cotas, calcos que replican una naturaleza que ya es la mímesis de nuestros gestos. La sombra chinesca de nuestro trazo, la brújula que señala nuestra ausencia. Puedo decir que yo también me borro poco a poco en mis diseños, dejo de ser a medida que crecen las paredes sobre el papel. Me vuelvo más vago en cada ángulo que abre sus piernas sobre el plano. Vuelvo a mirar las paredes, su teatralidad blanca de vela de barco. Ahí estamos, somos conejos, ciervos o liebres; camellos, bueyes o avestruces, somos negruras arrojadas al espacio por las manos de un fumanchú olvidadizo.
Nuestra urbe no se trata nada más que de una habitación que diseñamos para ser poblada. La ciudad es una pared para la proyección de sombras, el escenario donde se recortan las siluetas de cada uno, y no se puede aceptar intervenciones torpes, no hay lugar para cuerpos casuales o silvestres. No. El territorio de nuestras ideas es la maqueta, pero en las calles reales también debemos sostener la casta belleza del cartón. ¿Quién puede pensar que eso será habitado? El precio de la civilización es la libertad. No creamos ni para la función ni para la lógica. Creamos para el espacio, su pura vacuidad. Quiero enseñarles ese plexo de líneas. Es tan apropiado hablar del éxito de cada trazo en el plano; es tan evidente que la acumulación de esos elementos, vidrio, acero, ladrillo, produce verticales y contraplanos; ejes donde el arco y la bóveda acunan los sentidos; ángulos donde se guarecen las perspectivas para cobrar fuerza y salir disparadas hacia las terrazas como si fueran flechas lanzadas por un arquero.
No puedo pensar en la arquitectura sin el hombre: su necesaria ausencia, su indispensable vocación de no existir. Siempre pienso en esto cuando proyecto. Pienso que el hombre no va estar ahí, que va enaltecer la obra con su exilio, que las calles van a ser como esas que en las maquetas, adornamos con árboles de cartón y cochecitos de juguete. Porque es sabido, al menos para mí, que todo busca su borramiento, su negación. Todo menos el vacuo cartón de las ciudades que inventamos. Esas que esperan hombres de cartón que las recorran, espectrales, a la luz de los tableros de dibujo.


Desechos Argentinos

Julio Argentino Roca
Sobre los obreros siempre llueven piedras
Después de haber aniquilado 20000 indios con el propósito de incorporar más tierras disponibles para el pastoreo y el cultivo. Con la excusa de llevar adelante una gesta patriótica, frente a la ameza Chilena por los territorios de la Patagonia, decía cosas como estas.
Estamos como nación empeñados en una contienda de razas en que el indígena lleva sobre sí el tremendo anatema de su desaparición, escrito en nombre de la civilización. Destruyamos, pues, moralmente esa raza, aniquilemos sus resortes y organización política, desaparezca su orden de tribus y si es necesario divídase la familia. Esta raza quebrada y dispersa, acabará por abrazar la causa de la civilización. Las colonias centrales, la Marina, las provincias del norte y del litoral sirven de teatro para realizar este propósito”.
Palabras del Excelentísimo y Honorable ex-Presidente de la República Argentina Julio A. Roca.

domingo, abril 22, 2007

Al Stewart - Year of the cat

Algún fanático comparó la entrada de Al Stewart en la escena de la música con una segunda venida de Jesús al mundo. Delirio total. Sin embargo, esos puentes comparativos son típicos de la imaginación rockera. Al margen de esto, quisimos postear este querible viejazo.
Amén.

viernes, abril 20, 2007

Elecciones afectivas

Hasta la Victoria siempre !

Victoria Abril

jueves, abril 19, 2007

Deshechos por el petróleo


Je t' aime Irak

Según el Financial Times, las reservas de petróleo en el subsuelo irakí, serían en doble de lo que se creía.
Estos datos seguramente eran manejados por los servicios de inteligencia americanos, explicando porqué las tropas norteamericanas y sus aliadas no se retiran de Irak.
Bush se declaró afectado por los asesinatos del surcoreano loco, quien cual Rambo se bajó más de treinta personas en una universidad del estado de Virginia, pero al mismo George W., no se le mueve un pelo con los miles y miles de víctimas, también inocentes, que cayeron y caen a diario en manos de sus tropas, las que por otra parte sostienen a contrapelo una ocupación completamente ilegítima.
Parece que Bloomberga tiene razón cuando sostiene que la madre o padre de todos los males de la humanidad es la inseguridad. Es claro que el precio del petróleo y el control estratégico de las cuencas privilegiadas donde este líquido surge con extrema facilidad, no tienen nada que ver.
También es patético el rol que jugaron los medios de prensa locales cuando cedieron sus primeras planas a la "masacre de Virginia". Es para pensar en términos antropógicos cómo determinadas acciones patrimonialistas ejercidas por la política imperial de EE.UU. terminan montando fechas y eventos en los calendarios ajenos como si éstos fueran propios. La operación más reciente y emblemática fue la del 11 de septiembre. ¿Era el día del maestro? ¿Había pasado algo en Chile?

lunes, abril 16, 2007

Deshechos por la desigualdad

A Grondona le preocupan los piquetes


en verdad estos chicos no están deshechos. Los desechos son los que llaman ideológicos o políticos a los reclamos salariales, cuando es justamente a la inversa.

domingo, abril 08, 2007

Deshecharte

Hoy:
Basquiat

sábado, abril 07, 2007

Derechos deshechos

La letra con sangre ¿entra?

Los recientes incidentes acaecidos en Neuquén dejaron como saldo la muerte de un docente. Queda claro que estos gobiernos no pueden reprimir no porque, como dicen algunos, la falta de legitimidad en la esfera política no les permita ese tipo de actuaciones, sino porque a pesar de los malditos años del menemismo y la Alianza, con su ola entregadora en lo económico y despolitizadora en lo ideológico, la sociedad -aun maltrecha- demostró que la democracia es y debe ser el ejercicio horizontal del poder. Es por eso que estas democracias no pueden reprimir; no pueden hacerlo porque sólo ejercen el poder en transacciones hechas a medianoche y a espaldas de la gente. No ejercen el poder de una verdadera representatividad. El Estado en su versión de monopolio de la fuerza se encuentra en crisis. El famoso Estado ausente, es burlado todo el tiempo por una sociedad que le lleva la delantera y frente a la cual sólo puede dar respuestas estúpidas como la que dio en Neuquén. La sociedad actual, hace rato superó la escuela primaria como para que unos bárbaros de uniforme quieran llevar a la práctica el conocido eslogan de la pedagogía que titula esta nota.

Quedamos a la espera de la renuncia del excandidato a presidente 2007, por ahora gobernador de Neuquén.

Novedades en la web: El sitio de Daniel Guebel

Canto a mí mismo o el mito del escritor

Les recomendamos a todos nuestros lectores visitar la página de Daniel Guebel, un prolífico escritor argentino que recorrió diversos géneros desde el periodismo pasando por el teatro para desembocar en la narrativa sea esta cuento o novela.
En el sitio en cuestión (www.danielguebel.com.ar) van a encontrar un resumen biográfico y bibliográfico de Guebel, pero además –y acá ponemos el énfasis- podrán disfrutar de una entrevista en video, seguramente filmada en la intimidad del autor. Su casa subraya su discurso autobiográfico y después de ver el conjunto dispuesto por Guebel (su web, su film, etc.) el autor de “Nina” nos regala una pregunta no dicha explícitamente en el reportaje pero cuya licitud tácita cae por su propio peso: ¿Cómo ser escritor sin construir el propio mito? Guebel no responde a este interrogante, pero por el polo opuesto se dedica con medida retórica a montar –como en esos cuadros que veía en su niñez- su propia representación. Cómo diría Henry James, ¿es posible representar lo real?
La segunda cuestión que recorre subterránea las palabras de la entrevista es: ¿Tiene sentido un mito si no es a futuro? Esto demuestra cómo la composición de un recuerdo –legendario o no- a futuro se legitima siempre con materia pasada. Eso que creemos hipotético e impalpable –a futuro-, no es otra cosa que la deriva interpretativa de los huesos del ayer. Para eso Guebel repasa su formación familiar, su pertenencia de clase, sus primeras intuiciones y fastidios con el mundo circundante. Es acá cuando, finalmente, como bonus track, Guebel nos regala una conclusión fundamental para aquellos que piensen dedicarse a la escritura. Esto es, cómo viniendo de una infancia que el propio Guebel definió como de un perpetuo desencaje con el mundo se puede pasar a un desarrollo estratégico de encajar en él.

viernes, abril 06, 2007

Águas de Março!

Es la más grande y si bien este comentario peca de patoteril, lo decimos con mucho amor: es la única capaz de cantar y reir al mismo tiempo, tiene un tempo increible, por eso, para ustedes: Elis y Tom. (1974)

jueves, marzo 29, 2007

Deshecho forever

Más vidas que un Diego



Te bancamos siempre, dice un sitio no oficial del astro 10, el más grande, el heredero Bochini. Y sí, por qué no. Lo bancamos. Sin embargo, también es justo decir que tenemos las "pelotas" infladas de tanto dieguismo. ¡Qué paradoja! Pero será así por siempre. Más allá de la muerte, pervivirá en fotos, videos y homenajes. Nosotros, secretamente, aun con nuestras contradicciones, lo guardamos en el rincón de los bellos momentos del fútbol, ésos en los que aparece la inteligencia del arte en una jugada que se ilumina por el extrañamiento. Quizá Gwen Stefani pensó en él cuando compuso esta letra:

"And all I wanted was the simple things
A simple kind of life"

sábado, marzo 24, 2007

La memoria no deshecha


24 x 76 x 30000
la cifra del terror que hoy perdura en la desigualdad