Primera Parte "Soy la virgen"
Soy la virgen
“Soy la virgen, la reina del polvo dorado que entorcha los carnavales. En mi infancia vomité sobre el misal nacarado de mi tío el cura. En mi adolescencia fui violada por diez recolectores de basura. Ahora ensayo todo el año para el carnaval. Mi piel vive aterida de brillantina. Es tan suave el elixir de mi nombre que en las comparsas se embriagan con su perfume. Los pequeños obreros glotones y los mancebitos del litoral me tienen como a una reina, sin saber que, a mí, nadie puede entrarme. Soy una María desvelada que nada desnuda en las aguas barrosas del río Uruguay. En esas aguas los bagres nadan a la par mía, saltan y se solazan. Rozan mi piel con sus escamas, me hacen sentir como una sirena. Siempre que alcanzo la otra orilla, después de haber atravesado la violenta corriente del canal central del río, trepo la arena de la margen Charrúa y siento cómo los tapes orientales, escondidos en el follaje, se acarician como monitos Titís. Doctor, usted no se imagina qué dulce es mi vida. Tan llena de pasiones.” “Mientras la enfermera nos trae los análisis que hicimos la semana pasada, por qué no me cuenta cuándo cree que quedó preñada. Viendo su avanzado estado de embarazo, no dudo de que usted es una apasionada. Igualmente me imagino que debe haber causas que no conozco.”
“Soy la virgen, la reina del polvo dorado que entorcha los carnavales. En mi infancia vomité sobre el misal nacarado de mi tío el cura. En mi adolescencia fui violada por diez recolectores de basura. Ahora ensayo todo el año para el carnaval. Mi piel vive aterida de brillantina. Es tan suave el elixir de mi nombre que en las comparsas se embriagan con su perfume. Los pequeños obreros glotones y los mancebitos del litoral me tienen como a una reina, sin saber que, a mí, nadie puede entrarme. Soy una María desvelada que nada desnuda en las aguas barrosas del río Uruguay. En esas aguas los bagres nadan a la par mía, saltan y se solazan. Rozan mi piel con sus escamas, me hacen sentir como una sirena. Siempre que alcanzo la otra orilla, después de haber atravesado la violenta corriente del canal central del río, trepo la arena de la margen Charrúa y siento cómo los tapes orientales, escondidos en el follaje, se acarician como monitos Titís. Doctor, usted no se imagina qué dulce es mi vida. Tan llena de pasiones.” “Mientras la enfermera nos trae los análisis que hicimos la semana pasada, por qué no me cuenta cuándo cree que quedó preñada. Viendo su avanzado estado de embarazo, no dudo de que usted es una apasionada. Igualmente me imagino que debe haber causas que no conozco.”
2 comentarios:
Folletín? Entonces deberá someterlo/se al imperio de los sentimientos...
Ud. no querrá pertenecer al canon, verdad?
Pero qué bonito! Todas las chicas queremos pertenecer al reino de las estrellas!
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