sábado, mayo 17, 2008

Payaso mala onda

Ese es el mote de algún personaje televisivo que combina el imaginario rídiculo del payaso con la idea maléfica de un espíritu a la S. King en su novela "It". Los payasos, de por sí, suelen tener mala onda o bien son el centro de las burlas y las cachetadas. En su maquillaje se resume la sonrisa dibujada y el llanto. Ambas, expresiones que juntas no pueden menos que mover al desprecio o la lástima. Por otro lado, cuando a una persona se la llama "payaso", se le está faltando el respeto. No hay mucho más que analizar; y el que falta el respeto es un irrespetuoso. El calificativo "payaso" es discriminatorio. Otra veces, tildar de payaso a alguien no es otra cosa que un recurso cosificador. Despreciar al otro, "rebajarlo" a la estatura de payaso, es, sin vueltas, dejar las cosas tranquilas en el lugar donde no sólo no molestan sino donde las tenemos bajo control. Despreciar es una forma vil de construir nuestro propio espacio; un espacio ajeno a la autocrítica.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Le hizo un par de promesas imprudentes
y así fue que de ellas se aburrió,
las minitas aman los payasos
y la pasta de campeón.

Anónimo dijo...

Estigma

cuando el circo vuelve a matar a sus payasos
acorralados en la risa de los muertos…
como la nostalgia vaga por las lágrimas, pertinentes. osadas…escurridizas.
una plegaria se me escapa en el medio de la gente…alguien te ha visto escapar.
y el destino nos persigue, nos condena por las culpas que luego tendremos.
como son los caminos de los ciegos que solo a tientas sabrán que te has ido,
al mismo infierno que los payasos iré a parar,
por todas las risas indeseadas, por todas las lágrimas que se fueron tan en vano,
que el tiempo no disipará las tormentas de dolor que tendrá mi alma,
cuando te pierda en medio de la gente, rezando plegarias ausentes de Dios.


quién me salvará del cielo y del infierno?
cuando ya no estés…
existiran los ángeles o
los mios están guardados con dagas, en mi alma
tratando de salir…
como el dolor se ensaña en torturarme…
tengo el mapa de la perdición guardado en el corazón.
las tormentas en mis ojos, la neblina en la mente…el deseo hundido
en el fondo de la nada…
y nadie soy yo,
entre las nebulosas reluce el sol a través de tus ojos,
y los demonios me abrazan hasta hundirme
en el fuego.


Harry